El acceso a los servicios financieros en el mundo rural es uno de los retos de los cambios que se están produciendo en el sector financiero, consecuencia del nuevo modelo de servicio resultante del proceso de transformación digital al que estamos asistiendo en la sociedad actual
Las cajas rurales del Grupo Cooperativo Cajamar somos especialmente sensibles a esta situación, por nuestro origen vinculado al medio rural como por nuestra condición de cooperativas de crédito comprometidas con los territorios donde desarrollamos nuestra actividad.
De ahí que para nuestro Grupo sea una prioridad armonizar la necesaria reordenación del número de oficinas con facilitar el acceso a los servicios financieros en las poblaciones de menor tamaño y con población de edad más avanzada. Para ello tenemos ya en funcionamiento tres oficinas móviles que dan servicio a 31 pueblos del interior de las provincias de Almería, Alicante, Valencia y Castellón.
Los vehículos adaptados como oficinas itinerantes disponen de un espacio privado de atención al cliente, vestíbulo o sala de espera, cajero ‘full equip’ y zona de autoservicio (con iPad e impresora), y cuentan con una rampa para facilitar el acceso a personas con dificultades o movilidad reducida. Asimismo, están dotados de un sistema de comunicaciones con tecnología 3G, 4G y satélite y posicionamiento automático para realizar las comunicaciones con las máximas garantías de seguridad, incluso en las poblaciones más aisladas.
Las tres oficinas móviles del Grupo Cooperativo Cajamar recorren más de 5.100 kilómetros al mes para dar servicio a 21.500 personas residentes en localidades poco pobladas, con una edad media elevada y una significativa evolución decreciente en los últimos años. Todas ellas son clientes y usuarios de nuestro Grupo desde hace muchos años, a los que seguimos atendiendo y proporcionando servicios financieros pero de un modo diferente.
Estas nuevas oficinas móviles tienen una buena acogida entre los usuarios de los pueblos a los que dan servicio. Si bien en un principio se mostraban reticentes al cambio de su sucursal física por esta nueva oficina móvil, nuestros clientes y socios valoran que no se haya abandonado la prestación del servicio en sus municipios.
Las operaciones más habituales que se realizan son de caja, si bien estas oficinas itinerantes también están preparadas para prestar un amplio abanico de servicios, como contratación de planes de pensiones y seguros, fondos de inversión, tramitación de créditos, etc., tal y como se hace en una sucursal al uso. Y las medidas de seguridad con las que cuentan son prácticamente idénticas a las de cualquier otra oficina física.