Cajamar analiza con José Ignacio Conde-Ruiz las claves del futuro modelo de pensiones en España
El Centro de Cultura de Cajamar en Almería albergó en la tarde de ayer la presentación de la monografía ‘El futuro de las pensiones en España’, editada por la entidad y coordinada por catedrático de Fundamentos del Análisis Económico en la Universidad Complutense de Madrid y subdirector de la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea), José Ignacio Conde-Ruiz, quien intervino en el acto de presentación junto al presidente de Cajamar, Eduardo Baamonde, y el director de la colección de estudios ‘Mediterráneo Económico’, Manuel Gutiérrez.
Eduardo Baamonde animó a la clase política a que “tome nota de las propuestas de la publicación, ya que son muy interesantes”, y añadió que “la peor decisión es la que no se toma”, a la vez que reconoció que las pensiones son un asunto que todos los gobiernos intentan eludir por la impopularidad de las medidas necesarias que hay que tomar, por la complejidad del tema y por el cortoplacismo que suele caracterizar las medidas a tomar.
Por su parte, José Ignacio Conde-Ruiz abogó por una mayor flexibilidad del sistema, la mejora en las condiciones laborales e impulsar la política migratoria proactiva en origen, ordenada, segura y regularizada, como elementos imprescindibles para garantizar la sostenibilidad del sistema de pensiones en España. Durante su intervención, desgranó los análisis y conclusiones de 21 expertos sobre cómo hacer sostenible este sistema, a través de 15 artículos distribuidos en cuatro bloques temáticos.
El catedrático recomendó combatir la precariedad laboral y aumentar el apoyo institucional a las responsabilidades de crianza para frenar la caída de la natalidad: “España tiene una de las tasas de fecundidad más bajas de los países industrializados, con 1,23 hijos por mujer en edad fértil” y al mismo tiempo “es el país de Europa donde hay mayor diferencia entre los hijos que se tienen de media y los que se desean tener”.
Al hilo de ello, puso el acento en la “necesidad de la inmigración ordenada para la sostenibilidad de las pensiones” y el funcionamiento de la economía. “Si no entran inmigrantes, la población decaerá y la fuerza laboral no será suficiente”, anunció, añadiendo que “la política de inmigración regular tiene que ser proactiva, hay que ir a buscarlos para sectores como la hostelería, la construcción, la agricultura o los cuidades asistenciales”, cifrando en 10 millones los inmigrantes que necesitará el sistema español para ser viable dentro de pocos años.
En este sentido, indicó que “hay que acabar con la falacia de que existen unos determinados puestos de trabajo y que vienen personas a quitárnoslos”, pues se refiere a que no hay un conflicto real entre los mayores que no se jubilan y no liberan las plazas para los trabajadores jóvenes o esa idea de que la persona extranjera viene a quitar el trabajo a los españoles, una idea que “ya pululaba en el siglo XX con la incorporación de la mujer al mundo laboral”.
El coordinador de la obra recordó que todo sistema de pensiones constituye un pacto intergeneracional que se debe ir reescribiendo para hacer frente a las necesidades de un modelo de sociedad cambiante. En este sentido, explicó el origen de la limitación del trabajo hasta los 65 años en la mayoría de países desarrollados: “Cuando se estableció esta limitación era porque la tasa de personas que llegaban a esta edad era del 40 %, mientras que el otro 60 % hacía viable el sistema”. Con el aumento de la esperanza de vida, este umbral rondaría ahora los 89 años y si se le suma el descenso de la natalidad se entiende la completa inviabilidad de un modelo caduco.
Por ello, el economista defendió un aumento en la edad de jubilación, pero que este se produzca a través de un modelo flexible. Este es el caso del modelo sueco, explicó, por el que la persona cotiza desde el primer día en que trabaja la cantidad que considere y esta se va acumulando en una bolsa personal; al acercarse en el horizonte la edad de jubilación se informa a la persona de cuánto lleva cotizado y de la pensión que percibiría en caso de cuándo decidiera comenzar su jubilación, calculada teniendo en cuenta la esperanza de vida del país. De esta forma, la persona es la que decide si comienza a aportar más, cuándo decide jubilarse o un modelo mixto, empezar a cobrar su pensión mientras sigue trabajando y contribuyendo, por lo que seguiría sumando dinero a su propia pensión.
A estos retos se suman el de la sostenibilidad, el de la robotización de puestos de trabajo, el de la digitalización… Desafíos que el responsable del estudio entiende como una oportunidad para afrontar a nivel europeo y que mientras se rehúya el debate y las medidas a nivel nacional, el talento seguirá escapando a países donde ya han abordado con éxito ese pacto intergeneracional.
Sobre la colección Mediterráneo Económico
Mediterráneo Económico es una colección de monografías socioeconómicas editada por Cajamar desde el año 2002.
La colección está disponible en formato digital y de manera gratuita a través de la web www.mediterraneoeconomico.com.
A través de este enlace se puede acceder a ‘El futuro de las pensiones en España’, volumen 34 de la colección de estudios Mediterráneo Económico, editada por Cajamar.